Pere Meroño

. El pasado Aberri Eguna, Eusko Alkartasuna y Batasuna protagonizaron varios actos conjuntos. ¿Cómo valoras políticamente una circunstancia tan inusual?

. Lo valoro positivamente. Están haciendo una utilización mutua del uno y del otro. Se sirven mutuamente de salvavidas. Los unos –Eusko Alkartasuna- para salvar su identidad frente al PNV, y los otros –Batasuna- para salvar su identidad frente a ETA (…)

. ¿Y más estratégicamente?

. Sí, sí, efectivamente. El objetivo es estratégico. Y aquí no puedo por menos que descubrirme ante la valentía suicida de EA, y digo de EA -porque Batasuna no tiene aparentemente nada que perder, si bien ya analizaremos más profundamente más adelante-, pero EA, decía, tiene un valor increíble al aceptar o promover las amistades peligrosas con Batasuna. Porque EA tenía un futuro de poder en el seno del PNV, un futuro de poder y además de poder apacible, cómodo, sin sobresaltos, pero también sin historia, historia con mayúsculas. Batasuna, sobrevivirá mientras siga enfrentado al Estado “opresor”, igual que los kurdos, que han subsistido a sumerios, acadios, babilonios, macedonios, griegos, romanos, bizantinos, turcos, y árabes. Y desde hace 4.000 años han visto pasa, y caer, los más poderosos imperios de la tierra. Y ellos no han muerto. Bueno, pues los batasunos, igual. Puede caer la democracia española, puede caer la monarquía, puede venir otra dictadura, pero ellos, seguirán, con lo cual, para Batasuna, no es cuestión de vida o muerte, o mejor aún, de supervivencia, el “acuerdo”, para ellos, es garantía de vida mejor, ¿duradera? No estoy seguro, pero mejor, sí.

El futuro inmediato de Batasuna pasa, irremediablemente, por el fin de ETA. Esto no quiere decir la separación de ETA o el abandono de ETA, sino el fin de ETA. Y la asunción por parte de Batasuna del control de todo el entorno abertzale a partir de la desaparición de la violencia. Esto es el futuro inmediato de Batasuna.

. Inmediatamente, también, habrá acuerdo electoral para las municipales, y a juntas, ¿bajo qué formula? ¿Lo consentirá el Estado?

. ¿Bajo qué formula? No tengo ni idea, soy sociólogo pero no adivino. ¿Lo consentirá el Estado? Este Estado, no. Este Estado vuelve, de forma escandalosa, al fascismo. Date una vuelta por Madrid y veremos que eso es palpable. Es, incluso, irremediable. Porque como dijo ayer el fiscal Jiménez Villarejo, hablando del proceso contra el juez Garzón, “es una vergüenza que el Tribunal Supremo tome en cuenta, y se constituya, para defender al fascismo español”. El Estado español, igual que ETA en la otra parte, necesita la violencia, la coacción para ser fuertes. Para hacer ostentación de su soberbia, de su histórica y secular soberbia. Con lo cual, no creo que el actual Estado español permita que EA acabe lo que tan valientemente ha comenzado. Y no creo que este Estado permita a Batasuna lo que tan valientemente han comenzado: el fin de la violencia etarra. Porque el fin de la violencia etarra supondría el fin de la violencia del Estado, y eso no está en los planes inmediatos ni de nuestro gobierno “socialista”, ni en los planes de nuestra oposición “neofranquista”. Pero hay veces, como en la Transición,  que la historia no te deja ir por otros caminos, esperemos que el de ahora sea uno de esos momentos, y tanto ETA como el Estado no tengan más remedio que permitir la “operación” que parece que están llevando a cabo EA y Batasuna.

CAT ’06  La nit dels somriures glaçats

Josep Pallach 1920/1977

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