Miquel Roman

Nou Barris (Barcelona)

11 de març de 2007
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328. TRANSFORMACIÓ D’UN BARRI DEGRADAT DEL DISTRITE

El Periodico. BCN da un nuevo impulso a la reforma urbana de Torre Baró. El ayuntamiento proyecta un gran vial que conectará las zonas más habitadas. El plan incluye la construcción de 325 viviendas de protección oficial.

ALBERT OLLÉS, BARCELONA. La renovación del barrio de Torre Baró, uno de los principales exponentes de la caótica urbanización de la entrada norte de la ciudad durante la década los 60 y los 70, vivirá hoy un nuevo impulso. El Ayuntamiento de Barcelona aprobará en comisión de gobierno el plan de mejora urbana que permitirá habilitar una vía de conexión interna que cruzará el barrio y generará la construcción de nuevas promociones de viviendas.

Torre Baró forma con Ciutat Meridiana y Vallbona un conjunto único de barrios aislados hasta hace poco entre sí y separados al mismo tiempo del resto de la ciudad por la accidentada orografía natural de la zona y por las autopistas de entrada y salida de Barcelona. Pertenecientes al distrito de Nou Barris, estos terrenos se convirtieron en el destino de las últimas olas migratorias internas del pasado siglo, que se asentaron en la zona de forma dispersa, sin planificación previa y basándose en la autoconstrucción.

El plan que se aprueba hoy supone, según el concejal de Nou Barris, Ferran  Julián, "un salto adelante decisivo" en la progresiva ordenación de un barrio, cuya parte norte está calificada de zona forestal. El proyecto se centra en urbanizar el conocido por los vecinos como camino de Ronda, que recorre los núcleos más pobladas.

"Ahora es una carretera en mal estado que no tiene continuidad en algunos  tramos, ni tampoco aceras, por lo que los vecinos reivindicaban históricamente su mejora para convertirlo en el vial de conexión interna del barrio", explica Julián.

RESPETO AL ENTORNO NATURAL

La urbanización del camino generará en el entorno de varios de sus tramos la  construcción de 325 viviendas, todas ellas de protección oficial. "Las casas tendrán la peculiaridad de adaptarse y respetar el entorno natural, con pocas plantas de altura en aquellos lugares más cercanos al bosque", dice el concejal. La reforma afectará, según el distrito, a las viviendas de 13 familias, que serán expropiadas. Otro grupo de afectados, incluidos en la zona forestal, se trasladarán en breve a un edificio para realojados construido por el Patronato Municipal de la Vivienda en el propio barrio, junto a la calle de Martorelles.


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