Entre el Túria i el Ridaura

el bloc de vicent

Victus, d’Albert Sànchez Piñol. La “grandeur” de França.

“Clases de historia. Para los Ducroix, la Historia “Universal” era la historia de Francia; de Francia  y ¿que más? Ah, sí, de Francia. Luego había un rinconcito pequeñito más allá de las fronteras del rey, una periferia insignificant conocida com “mundo”. Este apartado merecia la décima parte de la asignatura y solo tenía algún interés cuando los partos asediaban Palmira, o cuando Catón le decia al senador romano que para tener una buena cosecha de higos chumbos habría que sembrar Cartago con sal. Al principio les manifesté mi escepticismo, peró un día, cuando Zenón aseveraba que Arquímedex (lo pronunciaban y escribían así, con equis final) tenia orígenes galos, lo dejé correr. En general los franceses son más abiertos de lo la gente cree. Eso sí, no intente usted convercerlos de que quizás, solo quizás, y según la opinión de algunos cartógrafos entendidos en la materia, París no es el centro geográfico del planeta Tierra. No van a discutírselo; simplemente pensarán que es usted un pobre infeliz.”

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“Idiomas, asignatura odiosa a los ojos de los Ducroix, pero imprescindible, ya que algunos desgraciados palurdos de Inglaterra, España, Austria y en general los palurdos de medio mundo, por extraño que pareciera, aún no sabian francés.” 

Bé, només hem de canviar França i París, per  Espanya i Madrid; canviar “els Ducroix” pel ministre Sr. Wert i ja tenim un tema d’actualitat.  Potser els Sr. Sánchez Piñol l’he encertada en escriure la seva darrera novel·la en castellà.


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