Els Papers de Santa Maria de Nassiu

EDUQUEU ELS XIQUETS I NO HAUREU DE CASTIGAR ELS HOMES (PITÀGORES)

20 de gener de 2009
0 comentaris

Al voltant de…

Sant Sebastià i sant Fructuós

Foguera de la Beata a Benigànim

De l’article Sangre, de Rosa Solbes (EL PAÍS, 16 de gener) , vull destacar un xicotet fragment: “Como dice una líder israelí “hay que hablar para no tener que llorar a los pies de una tumba”. Doncs això. Tant difícil és entendre que, per damunt de tot, tenim la paraula i el diàleg… i açò serveix per a altres “conflictes” que tenim més a prop. 

De l’article Rebajas, d’Ángel López García-Molins (EL PAÍS, 17 de gener), us deixe un fragment interessant: “Lo de los servicios públicos valencianos, en efecto, es un saldo, vivimos en una comunidad autònoma en liquidación total. No és que esa operación de hernia, que mi vecina lleva año y medio esperando y que le han cambiado por una faja, esté rebajada, es que es un saldo. Tampoco la clase con goteras de los hijos de esta señora se justifica porque ella pague menos (¿?) impuestos que su prima de Teruel. Pero mientras la gente siga sin darse cuenta y encima piense que la sanidad y la educación son más o menos imprescindibles, aquí no habrà pasado nada y la euforia de las rebajas continuarà sosteniendo a la autonomía con mayor crecimiento del paro de toda ESpaña. A falta de espectáculos mundiales, ahora estamos dando el espectáculo, que no es lo mismo.”
Pel que fa a EpC, diumenge podíem llegir la darrera ocurrència de la conselleria (de Font de Mora, vull dir):

PROYECTO INTEGRA-DOS:

REDUIR l’ABANDÓ ESCOLAR: “El programa Integra-Dos que presentó ayer el conseller Font de Mora pretende favorecer el rendimiento académico con el fin de que todos los alumnos de Educación Secundaria Obligatoria no abandonen los estudios.”

ELS DISSABTES DE 9 a 13: “Los alumnos de 4º de ESO con dificultades podrán asistir a este programa los sábados de 9 a 13 horas para que puedan recuperar y que no fracasen y abandonen.” (LEVANTE-EMV). 

Mireu, deixeu-vos ja d’INTEGRA-DOS i d’idees “innovadores” d’aquest tipus i, si voleu millorar la qualitat de l’ensenyament i frenar l’abandó escolar, comenceu per fer cas als que cada dia estem a les aules, així, amb molta sort i voluntat -i molts diners…- alguna coseta podrà millorar. Però amb projectes de classes dissabtes al matí… el fracàs està assegurat. Sembla que Camps té Font de Mora al govern perquè vaja “experimentant”… però no recorda que els experiments es fan amb gasosa. I gràcies.

I diumenge podíem llegir aquest article de Manuel Vicent, Los jueces. Més clar no ho pot dir. Bon dia.

Los jueces 

MANUEL VICENT 

 

EL PAÍS  –  Última – 18-01-2009

En general un juez es una persona, hombre o mujer, que recién
terminada la licenciatura de Derecho, alrededor de los 22 años, no tiene
demasiado claro por donde va a orientar su vida. Piensa que podría hacer
oposiciones a notarías o a abogacía del Estado, pero si en ese momento le
hubiera tocado el gordo de Navidad con una gran descarda de millones tal vez
habría montado un bar o una granja de pollos. Salvo raras excepciones, el
recién licenciado se decidió a opositar a judicatura por una razón coyuntural,
en cualquier caso muy alejada de la vocación sagrada de enderezar los torcidos
senderos del mundo a través de la justicia. Puede que necesitara colocarse a
como diera lugar, apremiado por la pareja que quería casarse o trató de
complacer a su padre, que también pertenecía a la carrera o simplemente se lo
jugó a los chinos con los compañeros de la facultad. De hecho, le parecía más
fácil ser juez que notario porque la de juez o fiscal era una oposición que se
convocaba todos los años con muchas plazas. Se encerró en casa a cal y canto
hasta cebarse con cuatrocientos temas del programa sin enterarse de las
pasiones que se cocían en la calle, salvo lo que oía por la ventana, y un buen
día soltó como un papagayo ante un tribunal la retahíla de artículos del código
que había deglutido y de no ser nadie, sin que el elector lo llamara con su
voto, pasó por oposición a formar parte de uno de los tres poderes del Estado,
el cual le regaló la potestad de meterle a usted en la cárcel o de llevarlo al
patíbulo si hubiera pena de muerte. Nadie del tribunal le preguntó a aquel
lejano opositor, que hoy por simple escalafón habrá llegado a lo más alto de la
magistratura, si era demócrata, beato, conservador o autoritario, pero es
evidente que el Estado tiene desprotegido ese flanco por donde puede colarse
con ciertas mañas toda clase de enemigos políticos. Aparte de pertenecer a un
estamento corporativo lleno de triquiñuelas jurídicas capaces de trabar la
maquinaria del gobierno por pura ideología, aquellos opositores pelanas cuyo
cargo es vitalicio, pueden sentar en el banquillo al presidente de la nación,
decir la última palabra a la hora de interpretar
la Constitución e
incluso dar un golpe de Estado. Estamos en sus manos. 

PD: Mireu si voeu més avall. Hi trobareu:

La crisis en clave valenciana 

Una caja con telarañas, JOSEP TORRENT , EL PAÍS – 18-01-2009


Apuntes 

Así se formará el nuevo
profesor
 


Radiografía del nuevo máster obligatorio para dar
clases en institutos, 
IGNACIO ZAFRA  –  Valencia, EL PAÍS – 16-01-2009


JOSEP VICENT BERGÓN,
LA PERVERSIÓ DE LA POLÍTICA (LEVANTE-EMV) 

 

La crisis en clave valenciana 
Una caja con telarañas 


JOSEP TORRENT 

 

EL PAÍS – 18-01-2009

Convengamos que el Consell y su presidente tienen una decidida
voluntad de afrontar la crisis económica adoptando medidas que, hasta dónde sea
posible, contribuyan a paliar el pavoroso desempleo que crece y crece en
la Comunidad Valenciana.
Convengámoslo así, porque, de no hacerlo, la conclusión sería que estamos
gobernados por unos sujetos indeseables, lo que no es el caso. El
vicepresidente económico Gerardo Camps viene desplegando una actividad
frenética (y sorprendente en él) para intentar trasladar a los ciudadanos la
impresión de estar seriamente implicado en la lucha contra la crisis. Tanto
que, en ocasiones, da la impresión de ser víctima de un auténtico estrés
informativo. Episodio que le hace repetir una y otra vez los mismos proyectos
con el inconfesado propósito de ver si un plan de 200 millones de euros,
repetido 200 veces, acaba por ser visto como una inyección económica de 40.000
millones. Y no es eso.

Camps (Gerardo)
ha anunciado en siete días un esfuerzo extrapresupuestario cercano a los 700
millones a través de dos planes. Como en las arcas autonómicas, además de
telarañas, sólo abundan las facturas impagadas a proveedores de toda clase y
condición, el vicepresidente se ha limitado a exhibir un vademécum no muy extenso
de medidas -algunas viejas y otras no tanto- voluntaristas sin ningún respaldo
económico que queda fiado al albur del acuerdo sobre financiación autonómica
que, paradojas de la vida, defiende el esforzado consejero de economía catalán,
Antoni Castells, y del que nos beneficiaremos, entre otros, los valencianos, en
una curiosa, singular e involuntaria aplicación de la cláusula Camps que tanta
gloria política dará a su inventor. Lamentablemente, el dinero que vaya a
paliar los efectos de la crisis no se podrá destinar a educación, sanidad o
bienestar social. Es lo que tiene ser la autonomía más endeudada de España.

Del presidente
Camps se supone que está preocupado por las crisis. Si a Zapatero le ha costado
lo suyo reconocer la realidad, está por ver que el presidente de
la Generalitat haga lo
propio. En sus reuniones con los líderes de la oposición ha insistido más en
temas secundarios como los trasvases o las infraestructuras que en la situación
económica. Y lo mismo se comprobó tras su entrevista con su homólogo murciano
Ángel Luis Valcárcel, al final de la cual se dedicó con fruición a practicar la
política de salón que más le gusta; Cargar contra el gobierno socialista.
Práctica esta habitual y preocupante. Maurice Duverger ya explicó como algunos
cargos públicos tienden a atribuir sus propios fracasos a un enemigo exterior.
Camps es un maestro en este campo.

Convengamos,
pues, en que hay más voluntad de utilizar la crisis para deteriorar al Gobierno
de España, sin que por ello podamos decir taxativamente que no hagan lo poco
que pueden en intentar hallar alguna solución.

Apuntes 
Así se formará el nuevo
profesor
 

Radiografía del nuevo máster obligatorio para dar
clases en institutos


IGNACIO ZAFRA  –  Valencia 

 

EL PAÍS – 16-01-2009

La movilización contra el proceso de Bolonia es compleja.
Algunos de los argumentos son teóricos, e implican una mirada a medio y largo
plazo sobre la universidad: es el caso del miedo a la mercantilización. Otros,
en cambio, son de carácter práctico y su llegada es inminente: es el caso del
máster de profesorado, un caballo de batalla de primer orden en las carreras de
Humanidades y Ciencias Básicas, no por casualidad los dos principales frentes
de la protesta.

El máster será
obligatorio para todos aquellos que quieran dar clase en un instituto (en
la ESO, Bachiller o Formación
Profesional), y sustituirá al CAP (Curso de Adaptación Pedagógica), que se las
ha arreglado para sobrevivir casi cuatro décadas a pesar de suscitar un rechazo
casi unánime por la insuficiente formación que da a los futuros docentes antes
de aterrizar en las aulas. ¿En qué consistirá el nuevo máster?

Tomando el que la Universitat de
València tiene en exposición pública hasta la semana que viene -la estructura
universitaria adaptada a Europa concede una relativa libertad a los campus para
confeccionar los títulos-, que prevé ofertar de entrada 1.170 plazas, tendrá un
año de duración (frente a los tres meses del CAP), constará de 60 créditos, y
ofrecerá 15 especialidades además de otras cuatro específicas para
la FP. No habrá restricciones
de origen para acceder a las especialidades (aunque lo normal será que alguien
que haya estudiado el grado en Historia elija la especialidad del máster en
Historia, nada impide que un graduado en Química pueda matricularse en la
especialidad de Filosofía). Pero si no puede acreditar unos conocimientos
previos sobre la especialidad (por ejemplo, el diploma de grado) deberá superar
un examen de acceso.

El máster se
estructurará en tres grandes bloques. “Pero no se impartirán de forma
secuencial, sino que todo ocurrirá a la vez”, señala Óscar Barberá,
director de
la Escuela
de Magisterio Ausiàs March.

El primer bloque
(16 de los 60 créditos) tratará sobre “materias básicas” y será común
a todas las especialidades. En él los futuros profesores se formarán en
pedagogía; psicología del aprendizaje; historia de la educación; atención a la
multiculturalidad (por ejemplo: cómo tratar con alumnos que tienen problemas
para entender el castellano y el valenciano); organización del aula; relaciones
de poder (entre el docente y los alumnos; el claustro, la dirección…);
desarrollo de la personalidad (los cambios psicológicos que los alumnos
experimentan durante la etapa que van al instituto); sociología; entorno
familiar…

El segundo bloque
aborda las “materias específicas” (28 créditos). Los contenidos
varían en función de la especialidad, pero presentan un guión común. De un
lado, conocer los conceptos básicos que tendrán que explicar (en Filosofía,
Inglés, Biología y Geología…); detectar los “obstáculos de
aprendizaje” que más a menudo encuentran los chavales en la materia
concreta (por ejemplo: ciertos déficits en matemáticas dificultan entender
conceptos de física) y ofrecer herramientas para afrontarlos. Del otro, “complementos
de formación”: todo aquello que, sin pertenecer estrictamente al programa,
puede ayudar al futuro docente y a sus alumnos a entender la materia (repasar
la historia de la ciencia, o conocer, por ejemplo la visión que la literatura
ha dado de la profesión de médico a lo largo de la historia, en el caso de
aquellos itinerarios que conducen a la carrera de Medicina).

El último bloque
(16 créditos) se centra en la práctica profesional, cuenta con un doble
tutelaje (en la universidad y en el instituto) y contiene una parte general
(por ejemplo, la organización del centro) y otra específica de cada
especialidad.

El máster lo
impartirán profesores de Magisterio, de Educación, de Secundaria y Bachillerato
(como asociados), y queda abierta la posibilidad de que participen docentes de
otras facultades de la universidad.




Muy largo
o muy corto

 

 

“A ser profesor
se aprende en el aula, siendo profesor. Yo he elegido la carrera de
Filosofía porque quiero estudiar Filosofía, y no quiero pasarme un año
estudiando pedagogía”. El comentario es de finales de noviembre.
Corresponde a una alumna de la asamblea de alumnos anti-Bolonia de la
facultad de Filosofía, en Valencia, ante la pregunta de cómo creía que le
iba a afectar personalmente la implantación del Espacio Europeo de Educación
Superior. Pero respuestas parecidas pueden oírse por toda la avenida de
Blasco Ibáñez: en Historia, Geografía, Historia del Arte, en las
Filologías; en el campus de ciencias de Burjassot, y en facultades de
Alicante y Castellón.

Para muchos alumnos
la cosa está clara: la reforma les quita un curso de carrera (en realidad
Bolonia homogeneiza todos los títulos en cuatro años, de modo que las
diplomaturas y las técnicas durarán uno más). Y, a cambio, si quieren dar
clase en institutos, tendrán que dedicar otro año -en vez de los tres meses
del Curso de Aptitud Pedagógica (CAP)- a estudiar el máster donde,
teóricamente, les enseñarán a enseñar. El máster, además será bastante más
caro que el CAP. Y también, si la petición formulada recientemente por los
rectores no es escuchada, más caro (en términos de precio de los créditos)
que la carrera.

El malestar también
ha prendido con fuerza entre el profesorado, que ve cómo una de las pocas
salidas profesionales naturales de sus titulados pasa a ser controlada por
las escuelas de Magisterio, lo que puede provocar una caída todavía mayor
de su matrícula (un alumno podrá cursar Derecho y hacer el máster en la
especialidad de Historia, por citar un caso). El CAP, dicen, había que
reformarlo, pero no así.

El otro bando, entre
tanto, afirma que si para ser maestro hacen falta tres años de carrera, era
absurdo que apenas se exigiera formación para ser profesor, más allá de la
carrera de origen. Y hay quien también de este lado da un paso más: el
máster de profesorado es un avance que mejorará el sistema educativo. Pero
para que el cambio fuera profundo habría que ir pensando en formar a los
futuros profesores durante la carrera: creando grados de profesor de
Matemáticas, de profesor de Historia… O, al menos, introduciendo
especialidades para ser docentes en los grados generales.

La reforma deja una
paradoja: todos los docentes recibirán formación específica en la
universidad para dar clases, salvo los profesores de universidad.

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

Datos
básicos del máster

 

 

– El máster contendrá
15 especialidades ajustadas a las materias que se imparten en los
institutos, además de cuatro especialidades más de Formación Profesional.

– Durará un
año,aunque se contemplan adaptaciones del programa para quienes no lo puedan
cursar a tiempo completo. El CAP, al que sustituye, duraba tres meses.

– El precio está por
definir. Al ser oficial, tendrá que ser un precio público, pero los
rectores han pedido que todos los másteres necesarios para ejercer una
profesión, como en este caso, cuesten lo mismo que las carreras.

– Se articulará en
tres grandes bloques. Uno, dedicado a la formación general de cualquier
profesor (métodos pedagógicos, atención a la multiculturalidad…). El
segundo, sobre la materia de la especialidad (Matemáticas, Inglés…) . Y
el tercero, práctico.

 

 

 

JOSEP VICENT BERGÓN, LA PERVERSIÓ DE LA POLÍTICA (LEVANTE-EMV)

 

 Arreu del món, diguem-ne
civilitzat, i a tenor de les seues darreres actuacions, s´està extenent
socialmentent i a poc a poc el desengany i la incredulitat cap els polítics.
Despullat el capitalisme salvatge de la seua alegre carasseta de comèdia grega,
hem assistit atònits a tot un seguit d´actuacions irracionals per part
d´aquells dels seus representants a nivell mundial, amb l´engany flagrant en la
majoria dels casos d´eixa massa social més o menys nombrosa que diuen
representar.

I és clar que detallar -tot i que fora
escaridament- la suma de totes elles, ben paleses d´altra banda per a qualsevol
analista seriós, seria una tasca prou feixuga.
 
Nyugats, doncs, de peus i mans i amb el seny
voluntàriament arraconat a hores d´ara atenent la suposada existència d´un
paradís econòmic artificialment inflat on tots suràvem, aquells polítics han
posat de relleu totes les contradiccions del sistema que majoritàriament
representen. Hi han excepcions, és clar, però és el cas que a tenor d´aquestes
actuacions generalitzades, es perverteix i falsifica el noble art de la
política, en la qual, a pesar de tot, alguns seguim creïent.

Aristòtels, a l´antiga Grècia, establia en la seua
filosofia d´aquesta dos tipus de govern, els purs, -regnat, aristocràcia i
democràcia- i els corruptes, -tirania, oligarquia i demagogia-. En el moment en
què ens trobem, però, és certament complicat establir diferències entre la
respectabilitat de tots dos sistemes, per més que és clar que els primers ens
garanteixen a priori una millor disposició, tot i que la representativitat de
l´aristocràcia hatja restat obsoleta i els reis hagen esdevinguts quasi
espectadors.
 
Així les coses, el fet és que d´aquells tres
enunciats només ens queda la democràcia. Una democràcia de vegades i per a més
inri falsificada, en la qual alguns confonen l´exercici del poder polític, a la
fi circumstancial i aleatori, amb l´estricta consideració d´allò que és al
capdavall la política pura.

Dels altres tipus de govern que deia Aristòtels,
els corruptes: tirania, oligarquia i demagogia, i atés que els dos primers, de
roïna memoria que no cal reviscolar ja els hem patit prou, ens quedem amb la
demagògia actual, cafitada a més de mentides.
 
La força d´aquesta demagògia i el quasi general
servilismo al que arrossega les masses, la reflexiona Sabato en un paràgraf del
seu assaig, «Hómens i engranatges».

«El demagog Anito no disposava d´altre recurs de
difusió que la seua pròpia veu, i no obstant va aconseguir convèncer a la massa
de què Sócrates devia de beure la cicuta. I la massa, que alguns creuen fora de
tota raó i justícia, va fer beure la cicuta a l´home més gran de Grècia.
Calcule´s el que poden fer els demagogs contemporanis amb la ràdio i la premsa
a les seues mans».

¿I com respon el poble en aquesta avinantesa, eixa
ingent massa de gent amb els seus propis i cassolencs problemes, agreujats a
hores d´ara per una crisi que era més que previsible i la participació de la
qual es redueix a dipositar el seu vot cada eix temps?
 
Doncs hi ha de tot, com en botiga. Els uns
acudeixen a votar honestament en funció de la seua particular ideología o
creença -per més que aquesta es confonga moltes vegades en la dels altres- i
estàn també aquells que podríem denominar com a «classe fraudulenta
privilegiada», els quals es troben més o menys satisfets en funció de com vagen
els seus negocis amb el poder establert, això quan no formen part del mateix.

Mentrestant a alguns, que ja fa temps què es vàrem
adonar que hi havíem malbaratat llargs anys de la nostra existència per utopies
possibles però mai no realitzades, se´ns esqueixa l´ànima a poc a poc.
 
Finalment hi ha unes poques persones, feroçment
individualistes, que només creuen en la llibertat intrínseca de cadascun. Sense
imposicions ni credos, ni ideologies falses o traïdes.

I tal i com està el món i els polítics potser
tinguen raó.

Us ha agradat aquest article? Compartiu-lo!

Deixa un comentari

L'adreça electrònica no es publicarà. Els camps necessaris estan marcats amb *

Aquest lloc està protegit per reCAPTCHA i s’apliquen la política de privadesa i les condicions del servei de Google.