Fa dies que circula per internet una petició de IANSA demanant que s’aturi un vaixell xinès carregat de 77 tones d’armes i munició destí de Zimbabwe. Els darrers dies el vaixell no ha pogut descarregar a Durban (Sudàfrica), on tenia previst deixar la mercaderia mortal per tal que fos transportada cap a Harare, perqué els estibadors del port es van negar a descarregar la càrrega. De moment cap altre port africà ha donat autorització per fer-ho i sembla, segons tinc entès, que el vaixell An Yue Jian podria estar tronant cap a la Xina abandonant per tant de fer l’entrega que tenía previst fer. En aquest context ha tingut lloc avui un debat al Parlament Europeu en el qual he manifestat la meva preocupació per la situació i he reclamat, novament, un Tractat Internacional d’Armaments que permeti controlar i evitar millor aquesta mena de pràctiques. Adjunto a continuació el contingut de la meva intervenció: (segueix…)

Intervención en plenaria de Raül Romeva para Urgencias: Zimbabwe, 24 de abril de 2008

A la vista de los acontecimientos considero que la situación de Zimbabwe bien merece ser tratada en esta sesión de urgencias. Me sumo, como no podria ser de otro modo, a quienes ya han manifestado su condena hacia las acciones represivas contra grupos opositores, periodistas o defensores de derechos humanos por parte de las fuerzas gubernamentales, y espero que esta resolución sirva para, al menos, apoyar a quienes desde dentro y desde fuera del país están intentando reconducir la situación en favor de un proceso democrático.

Sin embargo hay un aspecto que quiero destacar especialmente, y tiene que ver con el ya famoso caso del barco chino An Yue Jiang, cargado con 77 toneladas de armas y munición cuyo destino era Zimbabwe, y que se vió obligado a abandonar el puerto sudafriano de Durban después de que los estibadores se negaran a descargar-lo y de que un juez dictaminara que dichas armas no podían ser transportadas a través de sudáfrica.

Según mis informaciones el barco busca ahora otro puerto dónde descargar, aunque parece que, frente a la oposición en la zona por aceptar tal cargamento, el barco podría volver a China sin conseguir su propósito.

Una vez más, queda claro que la circulación de este barco no debería haber sido nunca aceptada, y que todos los gobiernos deben conjurarse para conseguir cuanto antes un Tratado Internacional sobre Transferencias de Armas puesto que, desgraciadamente, hay muchos casos en el mundo que, como Zimbabwe, no deberían ser aceptados como destinos de armas y munición de ningún tipo.

Sirva pues este ejemplo como una motivación más en favor de un ATT (Armes Trade Treaty) fuerte y jurídicamente vinculante, tal y como llevan años reclamando tanto ONG englobadas en la red IANSA, como, recordémoslo, este Parlamento.

Foto: el vaixell xinès An Yue Jian. Font: AP/ABC News