Pere Meroño

Diari d'un eurocomunista del #PSUC

20 de desembre de 2009
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Homenatge periodístic a Paco González Ledesma

En una esquina de la redacción se encontraba la sección de Sucesos del Exprés. Este grupo era en el diario como la legión en el ejército: no demasiado bien vistos, pero imprescindibles y combativos. El jefe del grupo era Paco Ledesma González, un veterano periodista, un tipo entrañable, romántico, curtido por más de treinta años a sus espaldas, incluidos aquellos primeros años en los que conoció los rigores de la censura franquista en sus propias carnes (…)

Había ido a parar a esa sección como el que buscaba un refugio, una cabaña en medio de la selva, desde la que poder desarrollar su profesión, harto ya de tanto mamoneo político y de tanto periodista servil. Ledesma era de los que comulgaba con la idea de que en el periodismo de sucesos se encontraba la verdadera esencia de la profesión y que, además, el crimen no tenía color político ni ideología y que, por lo tanto, podría trabajar en un periodismo menos prostituido.

 

Ledesma fumaba puros y escribía en una Olivetti añeja y desgastada, que se mantenía firme, como el dueño, ante el acecho de los terminales informáticos. Era un verdadero icono de la redacción.

 

. Soy Ledesma. Anda, sube, sube que hemos de hablar. Estás aquí porque te han defenestrado. Estás aquí porque nos falta gente. Estás aquí porque eres una especie de escoria para la dirección. Sin embargo, depende de ti no acabar dándoles la razón. Ellos, en sus despachos, con sus políticos y con sus putas reuniones en la “máxima”, no saben lo que nosotros sabemos… que el periodismo de verdad se hace aquí. No me conoces, pero ya me conocerás. Aquí pensamos que las manos de cada uno son su capital. Tanto tienes, tanto vales. ¿Entiendes? Aquí se reconoce enseguida a los impostores y a los enteradillos. De entrada quiero que sepas que en este rincón de la redacción se trabaja una hora más que en los demás y quiero que te mentalices de que, en el fondo, te ha tocado la lotería. Te han mandado a lo más puro del periodismo, un rincón por el que todos esos niños bonitos de allí afuera deberían de pasar aunque sólo fuera una temporadita.

 

Quan vaig llegir, ben gratament, fa unes setmanes, “Barcelona negra”, em va sorprendre, també molt agradablement, una de les col.laboracions periodístiques, la que venia signada per Carlos Quílez. Quílez em penso que relatava fets reals i de caràcter autobiogràfic, i aprofitava un parell de planes de la seva història per retre homenatge al llavors cap seu: Francesc González Ledesma, periodista, escriptor, el millor escriptor de novel.la negra d’Espanya i, també, pare de periodistes: d’Enric Gonzàlez, qui retira molt, físicament, al seu pare, antic corresponsal d’EL PAÍS a Estats Units, Itàlia, i ara tot just enviat a Israel, i que escriu bé i és valent en l’exercici crític i autocrític de la professió periodística …

 

Amb aquesta àmplia i personal ressenya de la cita de Quílez, vull sumar-me, jo que en sóc prou reticent a tot això, al reconeixement al mestre de periodistes tot encoratjant la lectura de la seva àmplia i diversa obra.

 

 Josep Pallach 1920/1977
 

CAT ’06  La nit dels somriures glaçats

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