Notices from nowhere

Democracy now finds there can be ample for all, but only if the souvereing fences are completely removed.

AZÚA & CO ( CIUDADANOS, L’ESTAT I EL CANVI DE MARXA)

/>

Visite sovint la colla que s’agombola al voltant de tota aquesta deriva (Pericays, Espades, Verduns, Molines, etc.). M’al·lucina que tinguen tanta oportunitat de publicar. A sobre n’hi ha 40, de comentaris a quin més patètic, al seu bloc.

Açò, d’ells, que ja està més vist que l’anar a peu: lerrouxisme, blasquisme, Ian paisleysmes, etc.

He trobat davant de la seua "acrobàcia intel·lectual" ( miopia….adobada d’antigor mental) el paral·lelisme de la seua activitat en resposta per-forma-da de vídeo al YOU TUBE.

ACTORS INTERVINENTS:

Cotxe: Estat.

Fel·latriu: l’activitat de la "troupe" 

El senyor: el polítics de torn d’allà.

L’última perla publicada a El Periódico del tal senyor està si preneu el Vull llegir més… la manera de "tractar" els personatges tampoc no té desperdici…com els porcs….. cosmopolitisme en barnús i sabatilles d’anar per casa.

Finales desprovistos de principios

Cuando Lord Byron estaba escribiendo su célebre poema Don Juan, el más hermoso canto jamás dedicado a la figura del diabólico libertino, había cumplido ya los 30 años. Era, para su época, un hombre en el umbral de la vejez. Además, su aspecto era lamentable: había engordado, se estaba quedando calvo, la cojera era más conspicua que nunca y él mismo se consideraba físicamente acabado. No obstante, en Venecia perseguía cualquier cosa que tuviera el aspecto aproximado de una hembra y tras poseerla se dedicaba a divulgar por toda la ciudad los caracteres internos de su conquista.

Entonces conoció a Teresa Guiccioli, condesita provinciana de 19 años destacadamente tonta, según todos los biógrafos, de una vanidad y una testarudez colosales, pero graciosa de cara. A los ojos de Byron tenía un atractivo peculiar: estaba casada con el conde Guiccioli, tipo riquísimo, sin escrúpulos, de izquierdas (o sea, enemigo del Papa), posible asesino y con un robusto físico de 60 años. La joya del viejo conde era una presa irresistible. Sería la última.

La historia de Lord Byron y Teresa no tiene nada de romántico, aunque los personajes se empeñaran en creerlo. El marido se dejó poner los cuernos porque el dinero y los contactos de Byron le gustaban más que su esposa. A la niña le chiflaba que la vieran con el célebre lord a sus pies. Los burgueses de Ravena y de Venecia se morían de risa. De modo que fue el pobre Byron quien hubo de poner sensatez en aquella cabeza de chorlito, el que limitara la codicia del marido, el que mantuviera una actitud convencional y prudente para evitar la difamación, y quien, tras producirse la separación, propusiera el matrimonio. En aquella historia, todos menos el poeta actuaron como diabólicos personajes byronianos.

Quizá asqueado por el papelón, Byron no tuvo más remedio que convertirse en un héroe. Salió huyendo de la condesa hacia el Egeo para ayudar en su lucha por la independencia a los nacionalistas griegos (que le robaron ipso facto), y al poco murió decentemente en Missolonghi. De enfermedad.

Publicat dins de Sense categoria | Deixa un comentari

  1. . ..que aquest vídeo reflecteix a la perfecció allò que ha estat la relació de Zapatero amb tots els catalans, del Nord i del Sud, de terra endins i de mar enllà, durant la present legislatura.

    No cal dir qui és Zapatero i qui nosaltres. O si?

Deixa un comentari

L'adreça electrònica no es publicarà. Els camps necessaris estan marcats amb *

Aquest lloc està protegit per reCAPTCHA i s’apliquen la política de privadesa i les condicions del servei de Google.