Hay que recordar que aunque esté
convocada una huelga general en todo el estado español para defender
los intereses de la clase trabajadora, existe el derecho a seguir siendo
explotado,… perdón, el derecho a trabajar. Si eres de los que
quieres ejercer el derecho a trabajar, no olvides que también existen
otro tipo de derechos que nadie debe arrebatarte:
Derecho
a que te alarguen la edad de jubilación hasta los 67 años o incluso a
los 70, aunque estés para el arrastre. Fundamental.
Derecho a que te suban los años de cotización para que puedas cobrar menos jubilación. Que no te quiten este derecho.
Derecho a que te bajen el sueldo. Defiéndelo.
También tienes derecho a que te despidan si tu jefe ha previsto pérdidas para el año que viene. Esto es importante.
No
olvides tu derecho a que tu jefe se pueda saltar el convenio y
ofrecerte unas condiciones de trabajo individuales por debajo de los
mínimos estipulados en convenio.
Defiende el derecho a que te puedan despedir en cuatro días, a pesar de que hayas decidido trabajar en un día de huelga.
Te corresponde el derecho a que te despidan por casi la mitad de dinero.
Derecho
a pensar que no vamos a conseguir nada con la huelga. Es mejor
quedarse quietos y no hacer nada. Aguantaremos con lo que venga y ya
está. Es por nuestro bien.
Que nadie te quite la ilusión de heredar la empresa. Estaría bueno.
Tienes
derecho a “pasar” de los sindicatos, porque son todos iguales. Lo
único que quieren es ganar dinero sin trabajar. Van a lo suyo y son
todos unos chupópteros ¡todos! Incluso la CNT, que son trabajadores, que
no tienen liberados, que se gestionan con la cuota de sus afiliados y
no cobran un euro del estado. A ti no te la dan.
Tienes derecho a ponerte en lugar del empresario. Cuantos problemas tiene, no como tú, egoísta.
No
renuncies al derecho de entregar tu dinero (dinero público) a los
bancos, para que se puedan hacer recortes en gastos sociales e
infraestructuras. ¿Para qué queremos tantos hospitales o escuelas? Lo
primero es la banca, que está sufriendo mucho.
Pero
sobre todo, que nadie te quite el derecho a dejar un mundo peor para
tus hijos, dilapidando los pocos derechos que nos quedan y que nuestros
antepasados conquistaron con sangre, sudor y lágrimas. Que les den por
saco, di que sí.